Carlos E. Cué, periodista político especializado en el "No a la Guerra". |
El diario El País lleva desde 1976 envenenándonos la sangre a todos los españoles, concretamente desde el 4 de mayo del citado año. Lo que significa que pronto cumplirá 35 años de una labor tan repugnante como secuaz y falsaria. Eso sí, por lo fino. Labor según la cual ese medio ha favorecido al socialismo en un toma y daca de lo más sórdido, sin importar en absoluto cuantas fechorías haya cometido la formación política que secunda. Sí, es de todos conocido que el periódico nunca ha dejado de apoyar al PSOE, a condición, claro está, de recibir numerosas concesiones, prebendas y otras bicocas destinadas al plato de lentejas o, por mejor decir, reservadas al consumo de pantagruélicas mariscadas, especialidad culinaria de todo buen izquierdista que se precie.
En los últimos tiempos, los capitostes de El País, encabezados por Cebrián, y el grupo en que se cobijan, ese multimedia Prisa que fue un regalo socialista y cuya voladura posee ya la espoleta activa y el reloj de cuenta atrás en marcha, le retiraron su confianza a Zapatero (exclusivamente a él) cuando comprobaron que el presidente prefirió favorecer al grupo trotskista de Roures. Y así están ahora ambos grupos, a cada cual más entrampado y en una auténtica contrarreloj a ver cuál es el que quiebra antes. ¿Dónde no habrá puesto ZP sus zarpas que no haya terminado en ruina?
No obstante, con ánimo de levantar cabeza antes de que todo el grupo (diario incluido) pase a manos del multimillonario Slim, que probablemente se quedará con lo que sea útil y el resto lo tirará a la basura, los de Prisa han escogido al sucesor político de ZP. Se han fijado nada menos que en la persona de un delincuente (en grado de presunto, por el momento), me refiero a 'Faisán' Rubalcaba, a quien ahora apoyan a tumba abierta (sin cal) mientras mantienen la guerra sin cuartel contra el PP, olvidándose esta pandilla de sectarios que fue precisamente en la era Aznar cuando ganaron más pasta al permitirle absorber 'Vía Digital' y hacer caso omiso de la sentencia del "antenicidio". ¡Ay, Aznar, cuántas cagadas te contemplan!
Un ejemplo de la continuidad de esa guerra contra el PP puede verse en un artículo de hoy a cargo de un tal Carlos E. Cué, periodista político que se especializó en el "No a la guerra" y en las jornadas que siguieron al 11-M (en sí mismo todo un bagaje de periodismo de cloaca destinado a la arenga fogosa del militante). Según dice el titular de Cué, "Se reanima la derecha de la derecha". Que es como califica, entre otros, a Jaime Mayor Oreja, uno de los pocos políticos decentes (salvo para El País, claro) que ha dado esta pseudo democracia que padecemos y en la que el batallón de Cués que pasta en Prisa se ha caracterizado por todo tipo de 1) demagogias y 2) falsedades, de tal modo que las opiniones vertidas en unas páginas consideradas netamente venenosas o son de clase 1) o de clase 2), pero nunca, repito, nunca poseen un grado mínimo de equidad.
Curiosamente ha sido el propio El País, en un ejercicio cósmico de contradicción respecto al artículo de Cué (que debe de estar encendido de rabia), quien destaca a toda plana el siguiente titular: "ETA considera que se está abriendo una nueva era". Y añade: "La banda terrorista realza la lucha por la independencia en un comunicado con motivo de la celebración del Aberri Eguna". El cuerpo de la noticia habla de los numerosos chanchullos etarras y de la reafirmación de la ETA para reclamar la independencia como "la única opción para lograr la libertad por completo", pero considera que el "camino será largo, difícil y duro". Es decir, los asesinos siguen exigiendo lo mismo de siempre y por los mismos métodos. Es sintomático que al periodista Cué no se le ocurriera otra cosa que calificar de extrema derecha a quien lleva años denunciando esa postura sanguinaria e irrenunciable de la ETA, o sea, Mayor Oreja. ¡Hay que ser muy miserable para calificar así a un gran hombre! O lo que es lo mismo: ¡Hay que escribir en El País y usar cualquier excusa para atacar al PP!
Autor: Policronio
Publicado el 24 de abril de 2011
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