domingo, 25 de noviembre de 2018

La insolencia de los mediocres

Patxi Izco, presidente de Osasuna.

Con motivo de la cabronada aérea que todos conocemos (huelga de controladores aéreos), el mejor equipo del mundo y de la historia del fútbol se ha visto obligado a viajar en autobús, hasta Pamplona, como si de una compañía de cómicos de tercera se tratara.


Y todo ello, por las protestas de un personaje patrocinador de la mediocridad futbolística, que previamente ha cobrado la entrada al espectáculo, a precio de un riñón y parte del otro.

O sea, que le cobras a la parroquia un pastón por ver el mejor espectáculo del mundo. Digo yo que ello requiere que los artistas estén en las mejoras condiciones físicas y mentales posibles que requiere el esfuerzo de la competición. Y en lugar de propiciar ello, con el aplazamiento del partido, exiges con el reglamento en la mano, el puto reglamento, que el partido se juega a su hora o no hay partido y pérdida de puntos para el equipo que ha elevado la geometría en movimiento a la categoría de arte.

Y además, te permites la sinrazón, sólo por la cosa de que los otros implicados en la competición viajan como pueden al lugar del partido y que aquí follamos todos o matamos a la puta. Pues habéis matado a la puta. Porque si en esas condiciones el más grande entre los grandes os ha metido tres, para disfrute del respetable no forofo, ya podemos imaginar qué hubiera sucedido en otras circunstancias. Otros ocho o más, como se merece el sujeto que ha pagado un pastón por una entrada, o el telespectador abonado que merece lo mejor.

Lo dicho, si eres mediocre, al menos haz el esfuerzo de ser modesto, más que nada,  por no fastidiarnos un partido, con toda la pinta de haber sido irrepetible, de haberse jugado en otras circunstancias, como todos los que juega esa partida de chavales que pasará a la historia con sus nombres grabados en letras de oro.

¡¡VISCA EL BARÇA!! 

Autor: Carlos J. Muñoz
Publicado el 5 de diciembre de 2010

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