En Barcelona acaba de vivirse un episodio en plena campaña electoral que refleja a la perfección lo que hay detrás del nacionalismo catalán: imposición, odio y violencia. Se ha comprobado así en un tenderete que el partido Ciutadans tenía montado en el paseo de San Juan, una avenida cercana al centro de la ciudad y habitada por clase media, es decir, votantes potenciales de C’s.
Pues bien, a cara descubierta y probablemente conscientes de la impunidad con la que actuaban, cuatro navajeros nacionalistas asaltaron el citado tenderete al grito de "Espanyols de merda, aneu cap a Espanya". Lo destrozaron todo, como se ve en la imagen, y se recrearon algún tiempo en arrojar huevos y pintura a los dos militantes de Ciutadans que habían repartido folletos. La policía, local o autonómica, ni estaba por allí ni llegó cuando debía. Como los navajeros, también se tomó su tiempo.
Es desesperante la falta de libertad que existe en Cataluña para expresarse a favor de algo distinto al nacionalismo. Solamente esa casta parásita y liberticida que lleva más de 30 años mandando y jodiendo a los catalanes, la social-nacionalista, puede hacer lo que quiera, donde quiera y cuando quiera. Y así, lo normal es que la gente no vaya a votar. Porque si suceden hechos semejantes al descrito en la ciudad de Barcelona, ¡qué no pasará en las poblaciones menores!
¿La solución? Sin duda el cumplimiento de la ley. Lo que supone adentrarse en un problema de índole superior, puesto que el socialismo gobernante en Cataluña, igual que en el conjunto de España, está compuesto esencialmente de delincuentes que incumplen las leyes que no les gustan. Así, pues, queda claro que el problema es el socialismo y por lo tanto es preciso marginarlo cuanto antes. En las urnas, naturalmente. Luego ya vendrá el atar corto a los nazis ‘asaltatenderetes’ y a los que los envían. Moraleja: Comienza por animarte a ir a votar el próximo domingo y escoge a un partido que nada tenga que ver con el socialismo o el nacionalismo. Quizá haya mucha gente como tú y se inicie así el fin de estos sinvergüenzas que ahora mandan.
Autor: Policronio
Publicado el 26 de noviembre de 2010
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Comentarios moderados.