Me reconcilio con Vidal-Quadras

Alejo Vidal-Quadras.

Días atrás se aseguró que un grupo de políticos del PP había votado una resolución del Parlamento europeo a favor del aborto y la eutanasia. Incluso algún medio añadió que también se había votado favorablemente el matrimonio gay del mismo sexo. La noticia la destapó el diario La Razón, mediante una crónica de M. Poveda que fue titulada así: “Once eurodiputados del PP votan a favor del aborto y la eutanasia”. Y añadió el periodista (¿?): “Los parlamentarios votaron a favor de reconocerlos como derechos fundamentales, frente a siete que se opusieron”.

Si se considera la importancia de la noticia y la mucha controversia que ha suscitado, motivando que algunos —entre los que me cuento— “partiéramos peras” con esos políticos inflados de “frivolité”, lo lógico sería pensar que el cronista M. Poveda ocupase, como mínimo, una jefatura de sección en La Razón o incluso una de las varias plazas de subdirector. Ahora bien, si se abre el “Quienes somos” del diario, esperando hallar al tal Poveda en lo alto del organigrama, pues resulta que su nombre no aparece por ningún lado. De donde se deduce que debe ser un plumilla del tres al cuarto, de la más pura infantería anónima, si es que no se trata de un becario desbocado y deseoso de gloria. Luego aquí, irremediablemente, debe colegirse que el director Marhuenda ha perdido una buena ocasión para ejercer su cargo como Dios manda. 

Pues bien, entre esos políticos que votaron supuestamente a favor del aborto y la eutanasia, se destacaba la presencia de Alejo Vidal-Quadras, con el que me sentí muy decepcionado puesto que creía conocerle y le ubicaba bastante alejado de los del “todo vale”. Incluso se reforzó mi decepción ante Alejo cuando oí decir a Luis Herrero, en la COPE, que él había votado en contra porque “no estaba dispuesto a caer en una trampa semántica”. Frase destacada igualmente en LD. Lo que me hizo pensar que los diputados favorables al sí se habían estudiado más bien poco el texto de lo que debían votar y actuaron muy a la ligera. Y claro, parlamentarios que se escudan en la rutina para decidirse alegremente ante cualquier cosa, con trampa o no, no es el mejor aval de un político. Especialmente en el caso de Vidal-Quadras, a quien siempre he considerado concienzudo y de una gran visión a la hora de analizar el degradado panorama social que vivimos.

No obstante, mi reconciliación con Alejo Vidal-Quadras comenzó hace varios días, cuando le vi hablar de esas votaciones europeas en el programa “El gato al agua”, de Intereconomía TV, donde dio toda clase de explicaciones que, a mi modo de ver, convertían en algo perfectamente normal el voto afirmativo. Entonces llegué a pensar algo así: “¡Qué lástima que no se me haya ocurrido grabar este debate para colgarlo en Batiburrillo!”. Pues bien, una aclaración parecida a la de entonces sí está grabada y lo ha hecho Libertad Digital TV. De modo, amigos de Batiburrillo, que os ofrezco (1) el vídeo donde Vidal-Quadras despeja cualquier duda respecto a la votación origen de la polémica. A mí, desde luego, Alejo me parece tan convincente y brillante como de costumbre. De manera que sigo considerándole un gran estadista.  

(1) El vídeo ya no está disponible.

Autor: Policronio

Publicado el 31 de enero de 2009