Zapatero es un traidor. Los españoles con un mínimo de decencia y sentido de la Historia así lo expresan en sus trabajos, cafés, tertulias y conversaciones varias. No en vano, la introducción de los términos "Zapatero" y "traidor" en Google se ha disparado desde el último atentado de ETA de 180.000 a 203.000 resultados a fecha de hoy, 2 de enero del 2006.
Zapatero es un traidor. Ha traicionado a España y a los españoles. Hasta el indecente Rubalcaba ha tenido, aunque sólo sea por esta vez, la decencia de anunciar la ruptura total de relaciones entre los marxistas de ETA y los gobernantes socialistas. La verdad es que siempre hubo una estrecha relación entre socialismo y terrorismo, pero que a la altura del año 2007, en la España moderna, constitucional y europea, tengamos que aguantar como presidente del Gobierno a un traidor es para tomar nota de la peor enfermedad que padece nuestro país: ¡¡alta traición!!
Zapatero es el traidor entre los traidores. No vela por España, como es su obligación. Sólo vela por sus intereses, por permanecer en el Poder, aunque sea atado a los etnomarxistas etarras. Zapatero es un traidor que prefiere apoyarse en los nacionalistas de la peor calaña a defender al resto de españoles de la constante amenaza de esa calaña.
Zapatero es un infame traidor. Ni siquiera ha tenido la decencia de pasarse por el aeropuerto de Barajas, al menos todavía. Le importan un bledo las víctimas de ETA. Lo mismo que las del fuego de Guadalajara. Que Dios le castigue. Por traidor.
Autor: Smith
Publicado el 2 de enero de 2007
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