Rafael Correa por una "América Latina socialista del siglo XXI"

Rafael Correa, neocomunista bolivariano.

Cuando uno no está en sus cabales, no puede decir más que tonterías. Es el caso del presidente electo de Ecuador, Rafael Correa, una marioneta de Hugo Chávez que acaba de proclamar el surgimiento de una “América Latina socialista del siglo XXI”. El disparate no puede ser mayor porque el socialismo, que fracasó ya en el siglo XX, como se ha demostrado hasta la saciedad, no va a hacer más que hundir a los países iberoamericanos que se plieguen a los diktats de Hugo Chávez.

¿De qué van todos estos descerebrados? Observen la brutal regresión económica por la que atraviesa Venezuela desde que el "socialismo" se ha hecho con las riendas del país caribeño. Ya sabemos que, si la cosa va mal, la cosa es del Conde Drácula. Y si va bien, del catequista de Carlitos Marx.

Qué pena nos da Ecuador. En manos de otro demagogo comunistoide. Fíjense en el disparatado concepto que maneja Rafael Correa sobre la globalización:

Esta globalización neoliberal, inhumana y cruel, que nos quiere convertir en mercados y no en naciones, que nos quiere hacer tan solo consumidores y no ciudadanos del mundo, es muy similar en términos conceptuales al capitalismo salvaje de la Revolución Industrial, donde antes de que, por medio de la acción colectiva, las naciones lograsen en su interior leyes de protección laboral, la explotación no tuvo límites.

Primero: la globalización trasciende al neoliberalismo.

Segundo: es humana, hecha por humanos, y nada cruel.

Tercero: respeta a las naciones pero no se supedita a ellas.

Cuarto: no nos reduce al consumo, sino que nos facilita este.

Quinto: el capitalismo no es salvaje, es libre.

Sexto: la Revolución Industrial fue un hito extraordinario.

Séptimo: la explotación no es un fenómeno capitalista.

Pobre Ecuador...

Autor: Smith

Publicado el 21 de enero de 2007