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| César Vidal Manzanares, un todo terreno en el mundo de la historiografía, la literatura y la religión. |
Seguimos analizando la opinión del doctor en Historia, César Vidal, sobre el genocidio de Paracuellos del Jarama (Madrid) y la relación directa, estrecha y esencial entre las brutales matanzas social-comunistoides y el dirigente de las JSU, Santiago Carrillo Solares. Hoy vamos a sacar a relucir la narración que César Vidal hace de la entrevista mantenida entre el diplomático Félix Schlayer y el consejero del Orden Público de Madrid.
"Schlayer no cesaba en sus gestiones para lograr la liberación de un ya asesinado Ricardo de la Cierva. Intentó así mantener una entrevista con Santiago Carrillo que le dio hora para las siete y media. Esperando a que llegara el momento de la cita, Schlayer volvió a dirigirse a la Modelo. Allí se confirmaron sus peores sospechas. El director de la institución penitenciaria le informó de que había partido con el convoy que supuestamente se dirigía a Valencia tras entregarlo a un comunista llamado Ángel Rivera. Tras obtener esta nueva información, Schlayer recogió al delegado de la Cruz Roja y se encaminó a su entrevista con Santiago Carrillo.
El consejero de Orden Público podía ser joven pero, ciertamente, demostró una notable astucia. En el curso de una conversación muy dilatada, prodigó a los dos diplomáticos todo tipo de palabras destinadas a infundirles tranquilidad. Insistió, por supuesto, en que los presos estaban seguros y en que no se producirían matanzas. A pesar de todo, Schlayer tuvo la sensación de que Carrillo le mentía y le hizo referencia a los datos con que contaba. Carrillo le hizo referencia a los datos con que contaba. Carrillo le dijo que ignoraba a qué se refería, una afirmación que a Schlayer le pareció "inverosímil". En el curso de los días siguientes, no sólo continuaron las sacas sino que Schlayer constató que Miaja y Carrillo no hacían nada para impedir las matanzas. "Y -como escribiría tiempo después- entonces sí que no podían alegar desconocimiento ya que estaban informados por nosotros.
Aquél día se produjo tambien una segunda saca de la Modelo aunque menos numerosa. Sus doscientos componentes fueron fusilados también en Paracuellos cuando ya había anochecido...".
César Vidal, Checas de Madrid, Barcelona, Belacqva de Ediciones y Publicaciones, S.L., 2003, p. 144.
César Vidal lo tiene claro. Carrillo estaba al tanto de los crímenes multitudinarios de la Cárcel Modelo, como era por otra parte su obligación: como organizador de los mismos y como consejero de Orden Público. Como organizador, porque según sus memorias, mientras las columnas nacionales avanzaban por Carabanchel y la Casa de Campo (7 de noviembre de 1936), él se dedicaba a la "lucha contra la quinta columna". Como consejero de Orden Público del Frente Popular en Madrid, porque su responsabilidad era la de controlar el funcionamiento de la represión antiderechista. Carrillo mintió a Schlayer porque lo sabía todo. Conocía perfectamente lo que estaba ocurriendo en la provincia de la capital aquellos días: sacas, matanzas, fusilamientos... La lucha anti quintacolumnista consistía en la limpieza de la retaguardia vía sacas de las cárceles y registros de las casas de sospechosos. De hecho, a pesar de lo inquirido por Sclayer y otros diplomáticos, las matanzas continuaron. Carrillo no hizo nada por detenerlas ni ante ni después. ¿Se necesita alguna prueba más? Si no lo sabía (que lo sabía), ya estaba al tanto de lo que ocurría por boca diplomática. Pero nada hizo para cambiar el rumbo sanguinario de los chequistas frentepopulistas.
Autor: Smith
Publicado el 3 de octubre de 2006
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