De todo lo leído estas últimas horas acerca de los recientes comicios que han tenido lugar en Cataluña, hay una carta publicada en La Razón que nos parece altamente clarificadora y que en atención a los lectores de Batiburrillo, vamos a reproducir.
Todos los políticos y analistas informativos llevan dos días hablando y escribiendo sobre quién ha ganado y quién ha perdido, pero la realidad es que todos los partidos, salvo Ciutadans, han bajado ostensiblemente su respaldo popular. Se mire como se mire. Eso sí, para ello hay que quitarse las gafas de la omertá catalana y del sectarismo partitocrático que actualmente domeñan el corral político catalán.
Todo el mundo se empeña en contar los resultados de unas elecciones por escaños o por porcentajes sobre votos emitidos. El caso es que en las elecciones catalanas CiU ha pasado de 1.024.425 votos a 928.511, lo cual supone una bajada del 10.4%; El PSC que fue votado por 1.031.454 electores, ahora ha obtenido 789.767 votos, lo que indica un retroceso de un 24,5%, y cálculos similares nos dicen que ERC ha perdido un 24%, el PP ha perdido un 20% y que el único partido que incrementa sus votos, además de la entrada de Ciutadans, es ICV que gana un 16.7%. La conclusión es clara: los que más han decepcionado a sus votantes, aparte de ERC, son los dos grandes partidos nacionales y eso es precisamente lo que debería darles un motivo para la reflexión si realmente lo que les importa son los ciudadanos y no los escaños, o lo que es lo mismo, el poder.
Autor: Smith
Publicado el 3 de noviembre de 2006
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