La mayoría de las informaciones (?) relativas al referéndum del Estatut señalan que el 73,90% de los electores que acudieron a votar lo hicieron a favor del nuevo texto que ha supuesto un empeño personal de Maragall y de Zapatero. Pero para ser más exactos hay que decir que de las 6.913.900 personas que, según el último censo realizado (abril 2006), viven en Cataluña, 1.881.765 han apoyado el Estatuto Zapatuto. EL dato es inapelable y su contundencia no deja lugar a la interpretación: el nuevo Estatuto de Cataluña sólo ha recibido el respaldo explícito de uno de cada tres catalanes llamados a las urnas en una jornada electoral marcada por la escasa participación, pues sólo el 49,42 por ciento de los electores votaron en el referéndum.
Si las cuentas no nos salen mal, el 27,30% de la población catalana ha dicho "sí" al Estatuto nacionalsocialista catalán. Deduzcan de aquí el porcentaje de políticos y funcionarios nacionalsocialistas, militantes y activistas de los partidos favorables al Estatuto Zapatuto, periodistas y cuentacuentistas de la omertá catalana (El Carmelo, el 3 por ciento, la corrupción generalizada...), empresarios vendidos al régimen, etc., así como a los familiares de todos ellos y algunas de sus amistades, y háganse la siguiente pregunta: ¿Cuántos catalanes han votado a favor del Estatut bipersonal (ZP-Mas) de manera desinteresada, por principios, por convicciones puras y duras, después de haber leído y meditado el farragoso texto? Bueno, mejor no se hagan la pregunta porque se contesta por sí sola.
Por cierto que habría que hacer un estudio un poco pormenorizado de la evolución del voto a lo largo de la jornada electoral. Al carácter netamente antidemocrático del referéndum -anticonstitucionalidad del texto, silenciamiento de la campaña por el 'no', agresiones a los partidarios del 'no', aparición de Maragall en la televisión el día de reflexión...-, habría que añadir la posibilidad de un pucherazo en toda regla. Si a las 18,00 horas la participación en el referéndum sobre el nuevo Estatut se situaba en el 35,19%, según el segundo avance de participación facilitado por la Generalitat de Cataluña, ¿cómo es posible que en tan sólo dos horas después dicha participación se disparase hasta el 49,42%, curiosamente tan cerca del 50%? Pío Moa señala que "Controladas las mesas del referéndum catalán por los secesionistas, partidos tan corruptos como el PSOE, debe darse por descontado un porcentaje de fraude, por lo que las cifras de votos han de ser todavía inferiores, al menos en los síes". Es una posible explicación.
Autor: Smith
Publicado el 19 de junio de 2006
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Comentarios moderados.