lunes, 12 de febrero de 2018

Privilegio y poder del neoforalismo vizcaíno

Jon Juaristi: ...Este nacionalismo renovado que ha sabido dividir a los constitucionalistas, convirtiendo a la izquierda vasca en una fuerza ancilar, no ha renunciado al objetivo de perpetuarse como avatar moderno de las antiguas oligarquías. 

Escribe Jon Juaristi en el avocentado ABC, diario que en nada se parece al de hace diez años, una más que interesante Tercera titulada Privilegio y poder. Juaristi es uno de los mayores expertos en nacionalismo vasco y vizcainismo. Su acreditada y vendidísima trilogía (El bucle melancólico, Sacra Némesis y El chimbo expiatorio) así lo acredita.


Cualquiera de los siguientes conceptos, tan explotados por los neoaranistas, va indisolublemente ligado a un antiliberalismo predemocrático: fueros, foralismo, privilegios, hidalguía, nobleza, aristocracia, territorialidad, derecho consuetudinario, pureza racial, carlismo, tradicionalismo, absolutismo, mayorazgos, Antiguo Régimen, derechos históricos, panvasquismo, nacionalismo, oligarquías...

No es que todos y cada uno de estos conceptos representan puntos de vista negativos sobre (y de) la sociedad. V. gr. la hidalguía bien entendida también va acompañada de virtudes (honor, patriotismo, defensa de la verdad...). Ahora bien, quien actualmente pretenda enfocar la sociedad bajo el prisma de unos "derechos históricos" más que discutibles -porque la realidad fue bien otra- e impresentables económica y socialmente, marra de cabo a rabo. Ya no es defendible que, porque Vizcaya (o Navarra, que no nos importa referirnos a los foralistas navarros) tuviera un rango de hidalguía en la Edad Media o en la Moderna, ahora tengamos los demás que tragar sus enchufes económicos y sus privilegios legales. Y es que siempre son los mismos los expoliados. Siempre.

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