Otra pifia más de la Casa Real

La foto de la discordia.

Ya hemos dicho en más de una ocasión que en España, de la Monarquía no queda mucho más que la Corona. Y sinceramente, para quedarnos con una Jefatura de Estado de papel couché, preferimos dar otras soluciones a los gravísimos problemas por los que actualmente atraviesa España. Por ejemplo, ¿no sería interesante la existencia de un Presidente de la República que frenara la deriva kerenskiana y disolvente del Presidente del Gobierno?

Suponemos que todos habrán estado al corriente del chapucero chrisma real con el que los Borbones nos obsequiaron estas pasadas Navidades. Con todos los medios a su alcance y no fueron capaces de reunirse ni para salir en una triste foto. Imagínense lo apretadas que estaban las agendas de esta gente: compra de unos Manolos en Londres, unas duras jornadas de esquí en Suiza, en Baqueira o donde sea, alguna regatita secreta por cualquier país del mundo...

Bien, según informa ESD, la Casa Real no invitó a Rajoy al bautizo para no tener que hacerlo con ERC. Ya lo ven. Mariano Rajoy, líder de la oposición, persona cabal de corte liberal-conservador, representante de unos 10.000.000 españoles, ninguneado por culpa del comensal junto a ETA en Perpignan, Josep Lluís Carod-Rovira, un auténtico republicano guillotinesco y líder de una Esquerra Re-pu-bli-ca-na que ha exigido a Juan Carlos que pida perdón por los crímenes de la Dictadura.

Hora es ya de reclamar a Juan Carlos I que empiece a ejercer la autoridad que le corresponde. El Estatuto Zapatuto amenaza con abrir la caja nacional de Pandora, descuartizando España en varias naciones y, hasta la fecha, apenas se le ha oído a nuestro Jefe de Estado decir nada al respecto. A ver si sale a la palestra de una vez el Rey para defender España. Hasta su padre, Don Juan de Borbón, entre pifia y pifia, soltaba algún aldabonazo patriótico. Y si puede, que lo haga en un acto castrense. A ver si entonces tiene narices el señor Bono para llamar al orden a S. M. El Rey.

Autor: Smith

Publicado el 16 de enero de 2006