Da la impresión de que los nacionalistas piensan rendirle tributo eterno al más radical de todos ellos, Arana. ¡Amigos, despertad de una vez, que ya estamos en el siglo XXI! |
El etnonacionalismo no es un concepto imaginario; ni siquiera es un concepto alejado de nuestras latitudes. Un etnonacionalista de tomo y lomo, al que en sus tiempos mozos le llamaban "der Nazi" sus colegas alemanes, acaba de recitar los siguientes disparates: 'el que es vasco termina siendo nacionalista', porque 'un vasco entero, ¿qué otra cosa puede ser?'. ¡Hace falta ser nazi! Pero nazi radical. Y luego vendrá algún blogger progre a darnos clases de democracia y a decirnos que crispamos, que exageramos, que ... ¡vayan ustedes a saber!
Hemos leído últimamente algunos paralelismos razonables entre el Corán y Mein Kampf -por ejemplo, en la persecución al mundo judío- pero, de momento, hay similitudes bastante más evidentes entre el sabinismo (ni siquiera podemos llamarle neosabinismo, porque están igual que hace cien años) y el nazismo. El sustrato etnonazionalista es idéntico. Pero idéntico, oigan. Por cierto, que esperamos la pronta actuación de las instituciones progresistas creadas al efecto de terminar con el racismo en Vascongadas. Para algo están.
Autor: Smith
Publicado el 1 de diciembre de 2005
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