Mapa de la sequía en España (año 2015). Por desgracia, hace décadas que se mantiene así. |
De cada 20 españoles uno de ellos es murciano. 1.5 millones de residentes en la Región -por suerte en aumento- y casi otro millón alejados de ella hace años como consecuencia de la emigración en masa iniciada en los años cincuenta y sesenta, etapa en la que ese franquismo que los nacionalistas tanto critican les mimó y enriqueció sus regiones en detrimento de otras. No es mi deseo escribir sobre un asunto localista que sólo interesa a los murcianos, pero es preciso referirse a esta Comunidad, tan castigada secularmente por su propia naturaleza y por los gobiernos de todas las épocas (¡Ah, si fuese cierta la estupidez de la deuda histórica!), para denunciar con vehemencia el sistema de reparto de privilegios y castigos que Rodríguez Zapatero y su gobierno de sectarios utilizan con los diversos territorios españoles, según sean éstos más o menos adictos a su Régimen o se necesite algo de ellos para mantenerse en el poder.
La Región de Murcia, que tal es su nombre oficial, se ha convertido de la noche a la mañana en una comunidad enemiga de la Secta, donde debe ejemplificarse sin miramiento alguno cuanta arbitrariedad sea necesaria con tal de que los murcianos nos consideremos zarandeados por los hombros y decantemos nuestro voto, resignadamente, hacia el peor presidente de Gobierno que haya dado la historia de España. Hablo de peor, cuando más bien deberían de anotarse otras virtudes que a Rodríguez le son perfectamente atribuibles: ruin, cobarde, partidista, traidor, injusto y mentecato, condiciones demostradas ya con creces en apenas año y medio en el poder. Suena fuerte, ¿verdad?, pero no por ello es menos cierto y demostrable.
Murcia es, por sus características y su abundante población una comunidad de renta muy baja en comparación con la media española, de infraestructuras obsoletas o inexistentes, de agricultura no subvencionada, de dependencia como ninguna otra del agua. Por tanto es un territorio ideal para ponerlo como ejemplo sobre lo erróneo de votar al PP si es que se desean alcanzar las prerrogativas que Zapatero dispensa a sus fieles. El inmoral presidente Rodríguez (ante todo la verdad de su condición) nos esta enviando un mensaje claro a todos los murcianos: Dejad de votar al PP y mi Gobierno os atenderá debidamente. No otra cosa significó la visita de la Vicepresidenta al feudo socialista de Lorca, cuando el terremoto afectó a una de sus pedanías, y las reiteradas reuniones que, igualmente en Lorca, se suceden entre su alcalde y la ministra del agua, que según dicen es una tal Narbona pero a la que aquí se la apellida merecidamente con otro nombre.
Primero fue la paralización del Plan Hidrológico por imposición de los secesionistas, que causó una gran pérdida a los agricultores murcianos, y levantinos en general, puesto que habían iniciado la modernización de sus tierras cultivables, en las que se realizaron cuantiosas inversiones que jamás se recuperarán. Luego fue la desidia a la hora de solicitar ayudas a la Unión Europea con motivo de las heladas generalizadas y la sequía. Unas ayudas a las que se tenía derecho y de las que nunca más se supo. Más tarde vino la ralentización de las desaladoras previstas ya en el PHN y prometidas, por vía de urgencia, como alternativa al trasvase del Ebro. Desaladoras que después de año y medio si te he visto no me acuerdo o bien, y como mucho, hay un solar de costa reservadas para ellas y devaluando turísticamente la zona en varios kilómetros a la redonda. Finalmente, el viernes pasado, se concedió un trasvase del Tajo exclusivamente para uso humano, lo que dará lugar a nuevas pérdidas de los escasos cultivos que aún quedan sin perderse.
En cuanto a las posibles alternativas a la agricultura en esta región, como pueda ser el turismo, la ministra Narbona ha declarado en varias ocasiones que en lo que de ella dependa no aceptará ningún plan residencial que carezca de recursos hídricos suficientes, a los que negará cualquier ayuda a posteriori en el suministro de agua, que es algo así como decirles a los murcianos: Como lo del agua va para largo (si es ella la que debe asegurar el suministro, probablemente no llegue a producirse nunca puesto que su única política es el ahorro), ni se os ocurra dedicaros al turismo, no vaya a ser que se me quejen los hosteleros de la Costa Brava o la Costa Dorada. Y para demostrar su arbitrariedad, la Narbona ha querido paralizar la construcción de Puerto Mayor (aprobado hace años por el gobierno de González) en la zona del Mar Menor, y el Estado está poniendo todas las pegas posibles al aeropuerto de Corvera, ubicado entre Cartagena y Murcia, que el Gobierno regional tiene en proyecto avanzado.
Tengo la impresión de que toda solución destinada a Murcia va a cámara lenta, o no cesan los inconvenientes que pone el Gobierno a cualquier iniciativa privada en esta zona, porque interesa postrar a la región para que sirva de ejemplo y aviso a navegantes. ¿Victimismo? Es posible, pero a cualquiera que nos acuse de ello se le podrá contestar con varios pliegos de agravios. Y el asunto no ha hecho más que empezar. ZP no se ha atrevido con La Rioja, Navarra o Baleares, territorios muy ricos que no dependen tanto como Murcia de ciertas decisiones de la Administración Central y que poseen ya una economía bien consolidada. Las comunidades socialistas, ni tocarlas, inversiones y subvenciones mil para ellas. El País Vasco o Canarias, lagarto, lagarto. A unos porque se les tiene pánico, que la cobardía de ZP aflora cada vez con mayor empeño, y a los insulares porque son socios a intervalos en el Parlamento.
¿Quiénes quedaban? Madrid y Murcia. La primera ha sido expoliada con descaro de una importante recaudación a la que tiene derecho, y además se le han negado partidas básicas para infraestructuras que debían correr por cuenta del Estado y que los Presupuestos Generales han preferido destinar a Cataluña o Andalucía. La segunda, Murcia, está siendo sometida a lo mismo que Madrid y encima se la deja morir de sed. También podría haberse incluido en la nómina de comunidades desfavorecidas a Castilla y León, pero representa casi un tercio de España, al menos territorialmente, y no creo que ZP se atreva en su propia tierra al uso del mismo grado de alevosía; claro que, visto lo visto en Salamanca, todo se andará si consideramos que la desfachatez interesada de este fulano no tiene límites conocidos.
Según leo en Libertad Digital (diario al que agradezco que lleve a su primera página un asunto con apariencia de índole local, pero que no lo es), Antonio Cerdá, consejero de Agricultura y Agua de la Región de Murcia, declaró que la política de Zapatero respecto a esta tierra representa un ataque frontal a todos los sectores de la economía murciana. Debo decir que comparto las declaraciones de Cerdá. Lo hago tras haber expuesto muy resumidos mis propios argumentos, a los que habría que añadir, como una prueba más del método sectario e inicuo utilizado por Zapatero con sus enemigos murcianos, que este hombre hace todo lo posible para que no trasciendan nuestras protestas. Tal y como se acredita en la noticia de El Semanal Digital, que reproduce unas declaraciones de Ruiz Vivo, secretario general de la Presidencia del Gobierno de Murcia, donde cuenta cuál ha sido la actuación de RTVE ante las protestas o reclamaciones efectuadas. Son dignas de leerse, baste decir que TVE en Murcia programó un concierto de King África mientras cientos de miles de personas reclamaban agua y se manifestaban por las calles de la capital.
Pues bien, Zapatero, si el mensaje que pretendes transmitirnos es el de votadme o aceptar la postración, por lo que a mí respecta y por la idea que tengo de algunos murcianos que conozco, déjame decirte que has pinchado en hueso y nos has infravalorado. Cuando tú seas un cadáver político, condición que no tardarás en adquirir a juzgar por el estropicio que organizas a diario en España, más de uno de esta tierra sacará su caja de puros y escogerá el mejor de ellos para fumárselo a la salud de tu cadáver. Yo el primero, desde luego.
Publicado el 2 de octubre de 2005
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