Todavía algunos se preguntan cómo ha triunfado finalmente el Partido Republicano. Y es que el resultado de estas elecciones no era fácilmente previsible.
Existe entre algunas capas socioculturales estadounidenses cierto apego hacia la corriente ideológica de los liberals. Éstos tienen su arraigo en algunas facultades de Economía, Política y Derecho, y en determinados campos profesionales, principalmente en la Costa Este. Aunque con notorias diferencias, estos liberals representan algo parecido a los progresistas de Europa y tienen bastante calado, más del que numéricamente les debiera corresponder, en determinados medios de opinión pública.
Por otra parte, el 80% de los medios de comunicación norteamericanos y algo así como el 90% de los artistas, cineastas, cantantes e “intelectuales”, se habían posicionado en contra de Bush, más que a favor de Kerry, todo hay que decirlo.
Bien, pues a pesar de todo, contra viento y marea, contra los progres, los polanquistas y los titiriteros de allí, Bush ha terminado venciendo con una rotundidad notable en estas elecciones. ¿Por qué? Pues muy sencillo. La realidad norteamericana es la que es. Y por mucho que los izquierdistas, y la mayoría de medios de opinión y artistas estuvieran a favor de Kerry, el pueblo norteamericano ha sabido sustraerse a la “realidad” inventada por los mass media y demás. Es como si aquí, el pueblo español no supiera que Rafael Vera se había inflado robando por lo menos unos 600 millones de pesetas de las de los años 80, porque ni El País ni la Ser ni RTV(PSO)E digan nada. Exactamente lo mismo. Al final, por mucha manipulación y mucho engaño, por mucha progresía, mezclada extrañamente con las grandes empresas mediáticas, el patriotismo norteamericano, la libertad económica, la lucha contra el terrorismo y los valores conservadores han terminado pudiendo más. Y desde que Reagan cogió las riendas de la nación estadounidense, los republicanos, salvo el periodo Clinton, han votado siempre la opción liberal-conservadora. Por algo será.
Autor: Smith
Artículo publicado el 4 de noviembre de 2004
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