El nanoestadista

Escribir no deja de ser una adicción. Hay días, como el de hoy, en los que la temperatura levantina (treinta y muchos grados me achicharran) te aplasta contra el butacón y sólo te deja mover una mano para extenderla, alternativamente, hacia el botellín de birra congelada o hacia el pitillorum. Al fondo, como un runrún ineludible hasta la hora de la siesta, se oye a la chiquillería disfrutar a lo grande en la piscina, con alguna madre gallina que no cesa de repetir: Vicentito, ven para acá que ahí te cubre.

Pero a pesar de las voces de la mamá de Vicentito, que impiden la concentración para teclear más de siete letras seguidas, parece que a uno le falte algo si no inserta en la bitácora aunque sea esa media página que nadie leerá, que para eso estamos en agosto, nada menos que a 10 de agosto, y maldita la gracia que hace cambiar la playa y la horchata (plan B) por Internet. Un Internet que hoy he cogido con desgana para repasar la prensa y me he encontrado casi huérfano de noticias. Por lo tanto, tras este preámbulo más o menos costumbrista, me dispongo a atizarle al Gobierno, que para eso está y para eso se lo gana a pulso. Así que quien no quiera temas políticos en plena canícula, puesto que las necedades gubernativas más bien acaloran, que pase directamente a otra bitácora o al apartado de los comentarios y escriba algo parecido a esto: Macho, estás vez lo has bordao. Sobre todo me ha gustado el final. Un final, por supuesto, que no habrá leído pero que a mí me llenará de vanidad y la siguiente birra congelada me sabrá todavía mejor.

Hay tres clases de gobiernos: Los simpáticos inoperantes, los eficientes insoportables y la UCD, que nunca se supo lo que era. Los socialistas formarían parte del primer grupo, González se mostraba populista y dicharachero y además jugaba al billar, un deporte de salón, o de tugurio, que suele consumir muchas horas y a él le permitía mirar para otro lado cuando en el PSOE se practicaba la corrupción a escala industrial y se la acabó aderezando con la guinda del crimen de Estado. Eso sí, el tipo era simpático y mofletudo, como un bebé inocente. Animalico.

También ZP formaría parte del grupo inicial. No parece que Mister Bean sea corrupto, al menos de momento, pero su sistema de no hacer nada y pretender contentar a todo el mundo (menos a quien se sienta español, por supuesto) le cataloga de inmediato en el apartado de los inoperantes pertinaces y, sobre todo y ante todo, en el de los sujetos perniciosos para la nación española, única existente desde hace muchos siglos aunque a más de un farsante le moleste.

Según El Periódico de Catalunya (Grupo Z), ese diario que no sabe ya cómo hacerlo para dorarle la píldora a los social-inútiles, lo más destacable de las últimas declaraciones del individuo que nos manda (que no es lo mismo que gobernar) es esta frase galactófaga, por lo empalagosa y contentadiza: Zapatero afirma que defenderá con la misma firmeza la igualdad y la diversidad de España. ¡Por Dios bendito y por la calva de Indalecio Prieto! ¡Habrá frase más contradictoria y hueca! ¡Sin duda este pájaro de ZP, sin ser demasiado devoto de Felipe, acaba de descubrir de una tacada la cuadratura del círculo, el motor de agua, los agujeros de gusano, el hiperespacio a través de la quinta dimensión, el blanconegro y el negroblanco! ¿Será bobo o pensará que los españoles somos bobos?

Pues no señor, ni una cosa ni otra, ni es bobo ni creo que opine que los demás lo somos, simplemente el talantudo juega a lo único que sabe, al ¡Señor, Señor, que me quede como estoy! Que yo ni lo había soñado y, mira por dónde, el 14-M me tocó el Euromillones. Para él, para ese gran estadista reducido en 100 días a la enésima potencia (nanoestadista, podríamos decir), el arte del buen gobierno consiste en destruir cualquier proyecto decente que le quedó del PP y luego, agotado el período destructivo, en no hacer absolutamente nada de nada o en secundar alguna frívola iniciativa de algún ministro no menos frívolo. O como mucho, pero no por su gusto y sí para evitar que sus socios lo pongan en la calle, quizá intente concederles con cuentagotas algunas de sus múltiples pretensiones. Porque si tiene que atender a todas las demandas de ese grupo de nazis y comunistas que le sostienen en el Parlamento, está más que claro que ZP pasará a la Historia como el último presidente de un Gobierno de España. Y España, si Dios no lo remedia, se habrá deshecho en cantones, taifas, estados inasociados y calles peatonales independientes. Él lo sabe, lo sabemos nosotros, lo saben los nazis y lo sabe el esqueleto del general Pavía.

Que me vienen con el cuento, a saber si es cierto, de que se han quemado 27.000 hectáreas en Sevilla y Huelva, pues reacciono de inmediato. Ponme con Manolo Chaves: ¡Por Dios Manolo, cómo se te ocurre ir a un concierto mientras se te queman dos provincias ahí en Andalucía! ¿Eso cae por el sur, no? Tú no te preocupes, Manolo, que yo con mi talante ya tengo la solución. No te la voy a dar ahora, porque tendría que ir hasta Sevilla (Ozú, qué caló) y aquí en Menorca sopla una brisita... Pero tranqui, Manolo, que ya le he dicho a los de Prisa y a mi amigo Pascual que la noticia es una exageración del PP y que tiene que aparecer lo justo en los medios. Menos mal, este Manolo es un bonachón.

--Que me sale un ministro zumbao y me dice que Cataluña es una nación y España una nación de naciones. Yo tranquilo, hago como que estoy fuera de cobertura en Menorca y para demostrarlo me dejo echar la foto en el yate. Y además, para que vean que tengo problemas de agenda por culpa del PP, como no he ido a Sevilla por lo del fuego tampoco voy a ir a Santander a leer un discurso, le pediré a un mindundi que lo lea y santas pascuas. Que al fin y al cabo sólo tenía que inaugurar el curso organizado por la Fundación Víctimas del Terrorismo. Y yo no estoy estos días para bosques quemados ni fundaciones. Que es verano, leñe, cuando los trabajadores y trabajadoras tenemos la obligación de descansar porque la patria nos necesitará en septiembre. Por cierto, ¿qué patria?

--Que me piden los del PP que en el Congreso comparezca la ministra Narbona para hablar de los incendios. Ponme con Rubalcaba: Alfredo, ¿cómo tenemos el tema de la Diputación Permanente? ¿Ah, que rechazas la comparecencia porque el PP usa la demagogia para pedir que vaya la Narbona? Sí, sí, total por por 27.000 hectareas de nada y dos muertos. Vale, vale. Llámame si hay algo nuevo ¡Por Dios lo que vale este Alfredo, pero qué mentiroso es!

Nota 1:

Efectivamente, El Periódico de Catalunya de hoy, en su edición digital, saca en portada las siguientes noticias (no pongo los enlaces porque estos tipos los quitan enseguida y hay que registrarse):

a) Sigue sin control el incendio de Alicante (como sabemos, en la Comunidad Valenciana gobierna el PP) que ya ha arrasado 10 hectáreas de pino y matorral (el subrayado es mío). 

b) El Congreso rechaza la petición del PP de que comparezca Narbona para hablar de incendios.

Nota 2:

Como al final me he pasao tres bosques reforestables (que diría Chaves), he decidido no hablar de los gobiernos eficientes y antipáticos ni de la UCD. Otro día será. O no.

Artículo publicado el 10 de agosto de 2004