ZP, por mí como si se la machaca

Por mí, como si la machaca con dos piedras.

No he querido escribir nada estos días sobre la "marcha" de Zapatero. ¿Razón? Me importa una higa lo que haga ese fulano con su vida. ¡El problema es el PSOE!, que le ha consentido nada menos que siete años de un gobierno apestoso en el que España ha estado a punto de irse a la mismísima mierda. Y... ¡cuidado!, que nuestra patria sigue en esa zona de letrinas malolientes y manteniendo el riesgo de irse por el desagüe, porque en el año que le queda al sujeto, de talante podrido según el más elemental término descriptivo, aún puede hacer muchísimo daño, cuanto más incentivado por ese rencor que se le advierte en el rostro, que es como acaban siempre los gobernantes socialistas: entre el odio y el deseo de desquite.

¿Cuántas cenas secretas habremos de costear los españoles para que Zapatero se sienta cómodo en estos meses que faltan para que se vaya a su puta casa? Y no me refiero a los manjares que devoren los comensales, sino a ese coste sobreañadido, de pagos diferidos durante muchos años, cuyo escote acabará por llevarnos a la parcelación de la patria, único precio que me resisto a pagar. ¿Cuántas bajezas morales y leyes de última hora no habremos de  soportar en este año casi eterno? Como por ejemplo la de eutanasia, que la disfrazan de muerte digna en ese argot repugnante que utiliza el socialismo, y que no es algo distinto a quitarse a los viejos de en medio. El sufrimiento de nuestros mayores, pongamos el dolor, puede evitarse perfectamente con las técnicas paliativas que ya existen, pero suponen un coste en horas de atención, tanto familiar como facultativa, muy alejado de lo que están dispuestos a pagar los promotores de esa ley de "punto final" que la Pajín quiere endosarnos antes de irse y dejar de jodernos.

No, no me importa en absoluto lo que le pase a ZP en el resto de su vida, por mí como si se la machaca con dos piedras o en medio de ellas. Eso sí, sea como machacador en activo o como político en paro, que ojalá le acompañen unos cuantos de sus correligionarios. A poder ser la ejecutiva en pleno del PSOE, que es la auténtica culpable de tanto desmán zapaterino como le han consentido. Lo único que siento es que más de uno de ellos no acabe purgando en la cárcel tanta calamidad económica y moral como nos están haciendo padecer a los españoles. 

Autor: Policronio

Publicado el 6 de abril de 2011