La ministra Bibiana Aído jura su cargo. |
Se publica en El País del día 18 de este mes una interesante entrevista con la ministra Bibiana Aído. Interesante no porque haga sensacionales declaraciones, sino porque en esta breve y amabilísima entrevista deja bien a las claras cómo entienden los socialistas el ejercicio del poder y su derecho al mismo.
Así, no duda Bibiana en afirmar que "el 90 % de las prostitutas están esclavizadas". Cuando el periodista comenta que según la ONU se trata de "1 de cada 7", responde la ministra sin inmutarse "que no hay datos concretos". Queda pues claro que la ministra da cifras que no sabe si son exactas y no tiene el más mínimo rubor en reconocerlo abiertamente.
En otro momento de la entrevista, nos da la ministra una de las claves del actual gobierno: el absoluto relativismo moral ajeno a cualquier valor. Así, y refiriéndose a la ley del aborto, no duda en aseverar que "los componentes morales, los debates ideológicos no pueden estar por encima de los elementos jurídicos". Queda pues claro que las leyes aprobadas por los socialistas están por encima del bien y el mal.
Aprovecha Bibiana la entrevista para defenderse de las críticas que recibe (según el periodista está "sometida al acoso mediático diario de la derecha") asegurando que "hay un movimiento organizado de críticas a las leyes de igualdad, a la ley contra la violencia de género, al Ministerio de Igualdad y a la ministra". La razón de tamañas e injustas críticas la explica contundente la ministra: "no pueden soportar que una mujer joven y de pueblo pueda ocupar un sillón en el Consejo de Ministros porque ellos consideran que el poder es algo que le pertenece". Con tan rotundos argumentos despacha la ministra las críticas de ese "movimiento" sin escrúpulos que se cree que el poder les pertenece cuando en absoluto es así. Porque, explica dicharachera la ministra, "molesta que alguien como yo esté ocupando el poder, un poder que me corresponde, que de manera natural es mío". Olvidémonos pues de elecciones y chorradas del estilo: el poder es de Bibiana por derecho natural. Ahí queda eso.
Ya lanzada, sigue la ministra rebatiendo las críticas que "llegan de la derecha" con argumentos de gran calado intelectual: "Aquí se da la unión de misoginia y gerontocracia, que puede ser una bomba letal". La ministra asegura sobrellevar tan injusta situación "con resistencia" (sic) y siendo consciente de que su actitud siempre será "frente a los insultos y la demagogia hay que seguir la senda recta de los principios, los compromisos y el trabajo". No puede quien suscribe menos que desear toda suerte de calamidades a quienes amargan de esta forma la vida a la ministra. No hay derecho. Pobre Bibiana. Que mala es la gente de derechas.
Aunque también recibe la igualitaria ministra críticas desde la izquierda: "No se me ha otorgado ni el beneficio de la duda. Hay un posicionamiento muy crítico".
Pero ni por estas se amedrenta la ministra, que asegura que "prohibiría la mentira y la manipulación permanente". Supongo que estas palabras habrán sido recibidas con la lógica preocupación en el seno del PSOE: la depositaria del poder por derecho natural pronunciándose contra su forma habitual de proceder. Y finaliza Bibiana recalcando que está a favor de la custodia compartida pero "no con la custodia compartida impuesta, que puede generar muchos más problemas". Si alguien me lo puede explicar, le quedaría muy agradecido.
Tras esta "combativa" entrevista me ha quedado claro que Bibiana es una digna socialista: sin argumentos, demagógica, victimista pero belicosa y parece que no se mueve más allá de los habituales lugares comunes. ¡En qué manos estamos!
Autor: Rafael Guerra
Publicado el 21 de julio de 2010
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