lunes, 22 de octubre de 2018

Resumen de cualquier año progre (habido o por haber)


Visto el panorama que ya tenemos y el que nos aguarda, lo natural es que uno se sienta tan deprimido como el muñegote de la imagen. Lean, lean y verán si no hay como para deprimirse o partirse de risa:


Había una vez un socialista que salió a cenar un sábado por la noche con su mujer. Al pasar por un parque vio a su hijo de 19 años, tirado en la acera con un coma etílico y a su otro hijo de 22 fumando marihuana mientras se pegaba un chute adicional, y dijo: ¡Ahora sí que hay la libertad!

Dos meses más tarde, cuando su hija de 16 años le comunicó que venía de la clínica de abortar porque no quería tener un niño de un hombre de 50 años con el que había tenido relaciones sexuales consentidas, tal como marca la ley, dijo: ¡Y además de libertad, hay igualdad!

Y un día, cuando llego del trabajo y encontró a su mujer con un marroquí en la cama, gritó: ¡Viva la integración! Y se sentó en el sofá a ver la televisión, mientras el morito terminaba la faena. Y escuchó en el telediario como una banda, compuesta por dos españoles, tres marroquíes, cuatro colombianos y tres turcos, había introducido en España 3.000 Kilos de cocaína, y exclamó: ¡He ahí la alianza de civilizaciones!

Al día siguiente fue de visita a casa de su hermana, y allí vio a su sobrino de 12 años, y le preguntó:

-¿Qué has aprendido hoy en el colegio?

-Hoy me han enseñado 40 formas distintas de masturbarme, 10 formas de colocarme el condón y 25 maneras de tener un coito satisfactorio, además de lo digno y maravilloso que es el amor homosexual.

-¡Viva la Educación para la Ciudadanía!

Y al volver a su casa, vio a unos jóvenes de la izquierda abertzale quemando un autobús. Y se dijo: “Sí señor, ahora la izquierda puede llevar a cabo sus proyectos, no como antes que estaban perseguidos por la dictadura”.

Y unos metros más adelante de su misma calle, en la azotea de un edificio observó cómo un empresario arruinado saltaba al vacío. Y pensó: “Luego dicen que no hay soluciones para salir de la crisis”.

Y así, mientras paseaba, iba reflexionando sobre lo bien que estaba España. Y le dijo a sus amigos: ¡Pues aún hay algún tonto de los cojones que vota a la derecha!

Texto recibido por correo a modo de felicitación navideña anticipada

Presentación y difusión: Policronio
Publicado el 21 de diciembre de 2009

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