La sentencia sobre la mayor masacre terrorista en toda Europa parece que no hubiese convencido en su día a unos cuantos españoles (entre los que se encuentran los miembros de este blog), de ahí que algunas de las asociaciones de víctimas afectadas vengan insistiendo en querer aclarar cuál fue el arma del crimen y qué movió al policía Sánchez Manzano a considerar chatarra sin valor probatorio lo que, para otros, fueron varias toneladas de material útil que debidamente analizadas hubiesen podido profundizar en la pesquisa. Y hasta aquí sólo podríamos hablar de opiniones, quizá tan válidas unas como las otras, si bien la verdad de lo sucedido es difícil que posea dos caras.
A través del diario El Mundo, que junto a Libertad Digital, es uno de los pocos medios que reflejan las novedades del 11-M, se ha sabido hoy, según reza el titular de la noticia, que: “El jefe de los análisis del explosivo refuta ahora la sentencia del 11-M”. Una declaración que bastaría, por sí sola, para reabrir el sumario a fin de dilucidar quiénes estuvieron implicados en la manipulación del caso o, inclusive, quiénes pueden haber sido condenados con pruebas nada sólidas. Porque si llega a comprobarse oficialmente lo que varios peritos afirman, que no fue Goma2 Eco el explosivo usado en los atentados, todo lo demás (Mina Conchita y cuanto rodea esa supuesta trama) quedaría en agua de borrajas y habría que apuntar hacia otra dirección.
Justamente un par de días antes de la declaración del máximo responsable policial en la pericia, la Audiencia Nacional rechazó por tercera vez reabrir el caso, incluso aunque sólo fuese parcialmente y dejando el resto a resultas del tema del explosivo. Si se tienen en cuenta los argumentos usados por el juez de la Audiencia Nacional para negarse a reabrirlo, "[la causa] ya ha sido resuelta en sentencia firme por el Tribunal Supremo", eso da a entender que se le cierra cualquier otro camino a una parte de los afectados, al menos en el ámbito de la justicia española. Bien, pues las preguntas que cabe formularse al respecto son estas: ¿Acabará el 11-M en el tribunal de Estrasburgo? ¿Deberán ser los jueces europeos los que al final decidan si debe continuarse la investigación sobre la autoría de la masacre?
La imagen de cabecera reproduce una encuesta de hoy mismo, sobre las 11 de la mañana, en la que puede apreciarse que un 77% de los participantes cree que hay motivos para reabrir el sumario del 11-M. Sí, hay que reconocer que solamente se trata de opiniones, pero que afectan a personas interesadas en que no se le dé carpetazo judicial a un asunto lleno de enigmas sin resolver. Lo que, a la postre, motiva la pregunta que sirve de título a este artículo: ¿Qué o quién impide reabrir el 11-M?
Equipo Batiburrillo
Publicado el 16 de diciembre de 2009
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Comentarios moderados.