"Muerte a Intereconomía"

Captura de pantalla de la página de Facebook donde se practicó la apología de la violencia contra los colaboradores del Grupo Intereconomía.

Por qué será que no me ha extrañado nada comprobar en qué se entretienen los nacionalistas catalanes, tan  retorcidos ellos y tan encanallados desde hace tiempo. Resulta que ahora han sacado una página en Facebook, de la que se hace eco el diario La Gaceta, donde se pide la muerte de Intereconomía y se da el siguiente argumento: “Si estás harto de los empresarios, iglesia y demás pantomimas de este país únete al grupo”.

Bien, pues resulta que ya hay (a las 09:30 horas del 19-1-10) nada menos que 8.347 malnacidos, y sumando, que se han apuntado a una guerra sucia de intención sangrienta, y no es exagerado calificarla de tal modo puesto que en la página se pide la muerte física de todos los contertulios del grupo Intereconomía. Guerra que los nazis catalanes promueven con el dinero de todos. Es decir, con dinero público. Y es así, porque La Gaceta le ha seguido el rastro a la IP del ordenador donde se creó la iniciativa y… “Todo apunta a que pertenece a la empresa Omnium Cultural, sociedad catalana cuyo eslogan es “Lengua, Cultura, País”. 

Si tenemos en cuenta que Ommium Cultural ha recibido 7,6 millones de euros a través de 80 subvenciones distintas de diversos departamentos de la ‘Generalitat’ catalana, sólo entre 2004 y 2008, y que en el último año aún se han incrementado más esos regalos, eso da una idea de que Omnium Cultural, que inició el boicot a los productos españoles mucho antes de que se pensara en boicotear el cava, es una ‘empresa’, por no llamarla directamente brazo propagandista con perfil terrorista, que obedece ciegamente a la mano que la alimenta. O sea, a los políticos nazis que ahora mandan en Cataluña.

De donde se deduce que a la gentuza que hay en el poder en Cataluña, tan adicta al golpe bajo y a la jugada traicionera, no es posible en absoluto aplicarle las reglas de la democracia. La única solución para un grado tal de depravación y felonía es mandarles sin más a la Legión Española y que los desaloje a todos. Aunque sólo sea para evitar tanta corrupción de caudales públicos destinados a propósitos degradantes que, como es lógico, acabarán algún día en violencia generalizada. Claro que también nos valdría la Guardia Civil para llevárselos al presidio que corresponda y en espera de juicio.

Autor: Policronio (artículo revisado)

Publicado el 19 de enero de 2010