Bibiana, ¿no será cuestión de cerebro en lugar de tetas?

Bibiana Aído, imagen de 2009.

Estoy convencido de que si en una encuesta se pidiese el antónimo de la palabra ministro, o sea, la acepción contraria a lo que debe suponer el bagaje intelectual y moral de tan alto cargo, más de uno sugeriría el término bibiana, cuyo significado apenas debería aclarársele a nadie porque sería de dominio público que esa palabra, en sí misma, llevaría aparejada la ineficacia, el atolondramiento, el sectarismo, las ideas volátiles respecto a temas de gran calado, como la vida humana, y muy especialmente el punto de vista más cutre y enojoso en relación a los valores que deben envolver a la familia, soporte básico de cualquier nación desde los tiempos de Roma para acá.

En estos días, Bibiana habla con desenvoltura sobre la idea de que las adolescentes puedan ponerse tetas —tal cual— sin el permiso paterno. Esta infeliz ignora expresamente que no todas las jovencitas experimentan antes de los 16 años su pleno desarrollo mamario, que como mínimo sería una de las causas para pensarse si se las ponen o no. Cita esa edad, además, para justificar su indigno proyecto —mejor dicho, el de ZParo— acerca de lo que será una ley genocida que evitará que 60.000 seres humanos (la mitad de los abortos que cada año se practican) lleguen anualmente a la edad pubescente, es decir, a cuestionarse si sus mamas poseen la dimensión deseada por la... digamos usuaria.

Y hablando de usos, no sería cuestión de que alguien le dijese a Bibiana que el órgano más importante de las personas es el cerebro y no los abultamientos que poseen en el pecho las hembras de los mamíferos. Claro que, con un buen cerebro y poca teta quizá no pudiese lograrse el objetivo único que persiguen los del “todo vale”: La promiscuidad desenfrenada en el terreno carnal y el vivir casi exclusivamente para practicar el sexo, no importa cuándo, no incumbe con quién, no interesa con qué razón ni resultado. Ya lo solucionará la píldora abortiva del día después o el aborto muchas semanas más tarde.

Socialistas decentes: ¿Es éste el Gobierno que nos merecemos?

Autor: Policronio

Publicado el 27 de mayo de 2009