No sé cuánto tiempo lleva Girauta colaborando con e-noticies, aunque aseguraría que no mucho, porque es un medio que repaso con asiduidad desde hace años y he empezado a ver a Girauta hace relativamente poco. Claro que es posible que yo no me fijase antes en él, pero lo dudo.
Comento lo anterior, para argumentar que uno tiene que ser de piedra si no quiere dejarse influenciar por el ambiente donde se desenvuelve profesionalmente. Cuanto más si es un medio periodístico al que la radicalidad nacionalista no le es ajena.
Aseguraría que e-noticies, que recibe sus buenas subvenciones del Tripartito, tanto directas como en forma de propaganda institucional o de las sociedades que controla, posee una línea editorial diametralmente opuesta a la de César Vidal. No hablemos ya del supuesto ambientillo en la trastienda.
Y claro, entre que fastidia viajar una vez a la semana a Madrid, que es algo que C. Vidal requiere a sus colaboradores, y lo que le hayan podido calentar la cabeza a Girauta... da como resultado que el director de la Linterna sea anticatalán.
Mal rollo este, cuando nada menos que después de cuatro años de colaboración se descubre que el jefe es anticatalán. A menos, claro está, que se confunda expresamente que una persona sea antinacionalista con ser anticatalana, y además se use para subir unos puntitos en según que ambientes, como se demuestra a través de lo que Girauta ha publicado en el Mundo, unas opiniones que, incluso siendo perfectamente sinceras —no digo ciertas—, no parecen las más adecuadas, ni en la forma ni en el medio, para ajustar cuentas.
CLD, en su blog Archipiélago Duda, nos ofrece unos antecedentes de ambos personajes que remontan la discrepancia a la cuestión del idioma. Que si el valenciano es catalán, que si no lo es… Yo no creo en esa línea argumental, no, al menos, entre dos personas bien formadas como son Girauta y Vidal. El tema del idioma catalán o valenciano apareja un mundo de complejidades y dudo mucho que alguna vez se produzca un consenso que no sea interesado entre los filólogos de una y otra corriente.
Por otra parte, si es cierto lo que también informa e-noticies, Juan Carlos Girauta ha dejado igualmente su columna de Libertad Digital. ¿Qué ocurre, que en este otro medio también son anticatalanes? ¿O es que la opinión de César Vidal se impone a la de cualquiera de sus directivos? ¡Hombre, “no fotem”!
Lo que parece claro es que Girauta se ha dado a conocer gracias a Libertad Digital, fama que luego le llevó a la COPE y a otros medios, y ahora pretende crearse su propio ambiente de trabajo, lo cual me parece legítimo en cuanto al fin que uno persigue, no tanto en cuanto a la excusa que ha usado para alejarse de quienes le abrieron las puertas al periodismo de opinión. Francamente, un alejamiento más elegante y discreto hubiese dado menos impresión del perro que muerde la mano de quien lo ha estado alimentando. Salvo que ciertas declaraciones, respondan o no a la realidad, sean una forma como otra de invertir.
Autor: Policronio
Publicado el 23 de marzo de 2009
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