Continúa el terror nacionalista-socialista

Sí, asesinar desde luego que saben, pero también saben poner bombas lapas en los coches, secuestrar, extorsionar, incendiar autobuses sin mirar si lo han desalojado todos sus pasajeros, amenazar a cualquiera que les plante cara, cuyas amenazas acaban cumpliendo. Y un largo etcétera de vilezas.

Mientras el gobierno izquierdista radical de Rodríguez continúa embarcado en su operación de desguace del Estado, la banda terrorista ultraizquierdista ETA prosigue su particular "campaña" de Navidad. Agentes de la Ertzaintza han decidido desalojar el aeropuerto de Bilbao como medida preventiva tras una llamada en nombre de los terroristas vascos.

La llamada podrá tener más o menos credibilidad, pero lo cierto es que el terrorismo vive no sólo de acciones, sino de sensaciones. La finalidad última de una banda terrorista es crear el máximo pánico posible entre la ciudadanía, para que este termine presionando al Estado para cambiar un statu quo determinado. No importa tanto que mueran dos personas o doscientas como que la población se sienta amenazada o amedrentada por los terroristas.

En este sentido, parece que ETA, que nunca había dejado del todo el tema del espacio aéreo, está cogiendo el manual de instrucciones del yihadismo y empieza a cogerle gusto a esto de los aeropuertos. Mientras haya quienes, como el descerebrado Ibarretxe o el "tarao" Ridao, sigan otorgando más crédito a una banda de criminales que al Partido Popular o al propio Gobierno de la nación, los terroristas seguirán en sus trece.

El proceso de desarme iniciado por Carod Rovira en Perpignan y Rodríguez Zapatero en Madrid hace tres años empieza a dar sus frutos: jueces comprados, fiscales vendidos, partidos terroristas legalizados, Gobierno y Fiscalía ayudando a los terroristas, presidencia del Gobierno cantando las virtudes de Otegi y De Juana, "procesos de paz", "accidentes mortales", retóricas huecas, proceso de rendición, demolición de la lucha antiterrorista, acabar con el terror "mediante la palabra", violencia callejera tolerada, exaltación del terrorismo por parte de concejales vascos, el Pacto Antiterrorista a la basura, desprecio a la AVT, desatención de fundaciones como la Gregorio Ordóñez, cinco años de negociación a espaldas de los españoles, zulos tapados, pistolas robadas, comandos activados... ¿De qué va el Gobierno socialista? ¿De qué va este ridículo personaje llamado Zapatero?

Autor: Smith
Publicado el 5 de enero de 2007