José Montilla y Artur Mas |
El candidato de CiU a la presidencia de la Generalidad, Artur Mas, ha acusado hoy al "presidenciable" del PSC, José Montilla, de "hacer vidalquadrismo" con el "asunto" del idioma catalán. El término, que no es nuevo, es una bufonada estigmatizadora nacionalista más. Para los nacionalistas catalanes, el "vidalquadrismo" es una especie de fascismo madridista, una ideología de extrema derecha en Cataluña, su intocable "patria". Y poco más.
Esta corriente insultona, a la que se ha apuntado el faltón Mas, no es nueva. Otro de los motes con los que los nacionalistas arremeten contra los políticos que no quieren la escisión de esa región española es el de "lerrouxista". Para los separatistas, "lerrouxista" es aquél político que no se pliegue a la dictadura (ya ruidosa) del secesionismo, que ha llevado a que a la altura del año 2006, en Cataluña se invierta en infraestructuras en función del PIB o de su población, mientras que en Madrid sólo se haga el 0%.
Pobre Montilla. Y eso que luego pidió disculpas en el programa, después de ser totalmente avasallado por un entrevistador que le espetaba su mala dicción del catalán. Como si en España se hablara correctamente el español o en el País Vasco el vascuence. Pero así son los nacionalistas: perfeccionistas, depuradores... ¿racistas? No olviden que siempre habrá un integrista nacionalista que supere a todos en la obsesión del proteccionismo idiomático: que no se hable de la lengua, que es un sagrado e intocable tótem.
Autor: Smith
Publicado el 6 de octubre de 2006
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