Arzalluz y Ortiz, tal para cual. |
Xabier Arzalluz, Der nazi, para sus colegas de sus tiempos juveniles, acaba de escribir sus memorias, en las cuales ha repasado el papel del PNV y el suyo personal en las últimas décadas. Menudo papelón: cómo ser más amigo de ETA que del PP y creerse más demócrata que Montesquieu y Rousseau juntos.
De entre toda la sarta de memeces -a las que tan acostumbrado nos tenía y que empezábamos a echar de menos-, algo cierto ha dicho. En su habitual estilo grosero, pero algo de razón lleva: "Me da vergüenza lo que veo estos días, tanta alabanza y coba injustificadas. Nosotros no derribamos al régimen, el Rey tampoco fue el gran protagonista ni el pueblo fue heroico. Todo fue mucho más ramplón". Las cosas, como son. Al Rey lo puso Franco y éste murió en la cama de un hospital de la Seguridad Social. Así que menos heroicidades.
Pero, yendo al punto central de este post. Fíjense en la última gran parida de Xabier: "El Rey participó en la transición para salvar su patrimonio". Argumentación de gran altura intelectual. Y, hablando de patrimonios. ¿Por qué no nos cuenta un poco Arzalluz cómo se forraba su difunto padre (q.e.p.d.) con el estanco sito en Azcoitia, que le regaló el dictador por su gran contribución a la causa nacional durante la guerra civil?
Autor: Smith
Publicado el 25 de noviembre de 2005
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