Casares Quiroga, Presidente del Gobierno |
¿Se imagina alguien que uno de los escoltas puestos por el ministro Alonso para la custodia de Mariano Rajoy fuese de la calaña del etarra Ternera o de cualquiera de los De Juana? ¿Es concebible que Zaplana se entreviste con el ministro del Interior, en el Congreso de los Diputados, para informarle de que conoce una trama en la que se pretende asesinar a Rajoy, y Alonso se limite a cruzarse de brazos? ¿Podríamos catalogar de honorable al ministro Alonso si Rajoy y Zaplana fuesen a verle a su despacho para reiterarle con mayor firmeza la denuncia y el ministro les contestase que no es más que el “criterio personal de algún agente”, manteniendo su actitud inicial de no reaccionar ante los datos ya específicos del probable atentado? Veamos algunos detalles que la "Causa General" nos ofrece en el anexo dedicado a la conspiración para asesinar a Calvo Sotelo.
La conspiración
"El 29 de junio de 1936, el agente de Policía de la plantilla de Madrid, D. Rodolfo Serrano de la Parte, es llamado a la Dirección General de Seguridad, que desempeña José Alonso Mallol, para que, en unión del también agente José Garriga Pato, se encargue de la escolta del SR. CALVO SOTELO, sustituyendo a la anterior, compuesta por D. Antonio Álvarez Ramos y don Basilio Gamo -este último asesinado durante el dominio del Frente Popular por el solo motivo de haber sido escolta del SR. Calvo SOTELO-".
"El nombramiento del Sr. Serrano de la Parte fue debido a considerársele, además de paisano, amigo del Sr. Casares Quiroga, y el de Garriga Pato, por ser masón y plenamente afecto al Frente Popular -datos plenamente comprobados en la "Causa General"-. Una vez que los dos agentes están en la Dirección General de Seguridad, son citados para el día siguiente, 30 de junio, compareciendo dicho día ante el jefe del personal, Lorenzo Aguirre Sánchez -solicitante de ingreso en la masonería-, el cual les hace saber que su misión cerca del SR. CALVO SOTELO no sería de protección, sino de espionaje, debiendo dar cuenta diaria y detallada de las personas con quienes se relacionara".
"Dos días más tarde, Aguirre, después de tratar inútilmente de hacer pasar a los agentes a presencia del Director General de Seguridad, Alonso Mallol, les previene, en nombre de este último, que, caso de ocurrir un atentado contra el SR. CALVO SOTELO, debían, si sucedía en sitio céntrico, simular una protección; pero, en realidad, abstenerse de ayudar en nada, y si era descampado, ayudar a darle muerte".
"Don Rodolfo Serrano de la Parte, hombre que había recibido una educación cristiana, incapaz de cumplir la orden dada en nombre del Director General de Seguridad por su superior jerárquico, se lo comunica inmediatamente al Diputado a Cortes D. Joaquín Bau Nolla, íntimo amigo del SR. CALVO SOTELO. Esta entrevista se inicia en los pasillos de la Cámara de los Diputados, en la que tiene entrada Serrano de la Parte desde el momento en que se encarga de la escolta del SR. CALVO SOTELO, y se continúa al día siguiente en una cervecería de la calle de Alcalá".
"El Sr. Bau da cuenta a CALVO SOTELO de lo que ocurre y, de acuerdo con este último, visita al Ministro de la Gobernación, Moles, en el despacho de Ministros del Congreso de los Diputados, ante quien relata el intento de asesinar al SR. CALVO SOTELO con la complicidad de uno de los agentes de la autoridad, sin decir el conducto por quien ha recibido la noticia, negando dicho Ministro su intervención en dicho asunto".
"Al día siguiente, es el mismo SR. CALVO SOTELO quien visita al Ministro de la Gobernación, en compañía del Sr. Bau, para reiterarle con mayor firmeza la denuncia; Moles insinúa que podían ser criterios personales de algún agente, a lo que CALVO SOTELO, con vehemencia, pregunta, refiriéndose al Ministro, «si ellos eran una «pandilla» o un Gobierno» y que hacía recaer sobre este último las consecuencias que pudieran derivarse de las órdenes dadas por el Sr. Aguirre, el que no sólo continuó con la confianza del Gobierno, sino que más tarde es premiado por el mismo Gobierno con el cargo de Jefe Superior de Policía de Madrid. El Ministro, según el testigo presencial Sr. Bau, no reacciona ante todas las acusaciones, como lógica y naturalmente hubiese reaccionado una persona digna, sin relación alguna con el crimen, y que demás encarnaba el Poder Público".
"Es de hacer notar que, con la suficiente antelación, se señala la figura del SR. CALVO SOTELO a las masas marxistas por elementos afectos del Gobierno que, por boca de su jefe, se define como beligerante, y así, el día 23 de junio de 1936, el periódico madrileño El Socialista, en su número 8.169, publica en la primera página, en la quinta columna, un artículo titulado "Intimidades del adversario".—"CALVO SOTELO, cabeza rectora del Fascismo", habiendo sido inspirado este violento artículo, según declaración prestada en la Causa General, por Indalecio Prieto. El Sr. Serrano de la Parte [agente al que horrorizan los preparativos para al crimen de Estado] es trasladado inmediatamente a Galicia".
"En las primeras horas de la noche del 12 de julio de 1936, el Teniente de Asalto, afecto al Frente Popular, Castillo, es asesinado por unos desconocidos al cruzarse con él en la calle, no habiendo el Gobierno del Frente Popular logrado averiguar ni decir quiénes fueron los asesinos".
"A partir de este suceso, los jefes y oficiales del Cuerpo de Asalto del cuartel de Pontejos, inmediato al Ministerio de la Gobernación, celebran conferencias con este Ministro, con el Presidente del Consejo de Ministros y Ministro de la Guerra, Casares Quiroga, y con el Director General de Seguridad, Alonso Mallol".
"Las principales figuras que conferencian con las altas autoridades del Gobierno de la República son el Comandante Ricardo Burillo Stolle, el Teniente Máximo Moreno y el Capitán Fernando Condés, de la Guardia Civil este último, todos ellos de la entera confianza del Frente Popular".
PD: Los interrogantes iniciales y los subrayados corren por mi cuenta, el resto ha sido extraído de la "Causa General".
Publicado el 13 de agosto de 2005
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