Grupúsculo: (Del fr. groupuscule). 1. m. Grupo poco numeroso de personas que interviene activamente en algún asunto frente a otro u otros grupos mucho mayores. R. A. E. ©.
Todavía existe un núcleo importante de españoles que nos consideramos depositarios de la tradición cultural cristiana y del patriotismo liberal que arranca de las Cortes de Cádiz. Personajes como Rodríguez Zapatero, llenos de un rencor y sectarismo que teníamos olvidados desde los tiempos más trágicos de nuestra Historia, nos pueden incitar al pataleo, a la refriega intelectual o a dar la batalla por la Libertad y por España desde la calle o desde donde haga falta. Pero guste o no, con mejores o peores artimañas, el PSOE ganó las elecciones en el año 2004, aunque fuera Bin Laden mediante.
Distinta es la cuestión que atañe al "grupo poco numeroso de personas que interviene activamente en algún asunto frente a otro u otros grupos mucho mayores", llamado Esquerra Republicana de Cataluña. ERC es un partido que tiene dos motores ideológicos básicos: el odio a la Iglesia Católica y el odio a España, y en esos dos odios fundamenta toda su actividad. Sabida es la trayectoria hipermasónica y laicista de este grupúsculo desde que nació. Casi todos sus miembros destacados del periodo republicano eran masones y de alta graduación. Por otra parte, su odio antiespañol, llevó al partido a sublevarse antidemocráticamente contra un gobierno totalmente moderado y que, a diferencia del Frente Popular en 1936, respetaba el Estado de Derecho como el que más.
Desde que el PSOE se empeñó en sustituir a CiU de la Generalitat y poner a su sucursal catalana al frente del Gobierno de Cataluña, pactando con la Esquerra, España viene soportando una serie de ignominias e insultos que no debieran ser tolerados. Más lamentable resulta, aún si cabe que, a raíz del desembarco del tancredismo en Moncloa, un grupúsculo político con poco más de 600.000 votos se haya convertido en una fuerza política decisiva y decisoria en un país con más de 40 millones de personas. Una situación totalmente contra natura, inmoral, injusta y antidemocrática.
ERC ha presentado la semana pasado su propuesta de reforma de la Constitución Española. La propuesta, en resumen, defiende un Estado federal plurinacional en el que las naciones que lo integran tengan reconocido el derecho a la secesión. Una propuesta anticonstitucional de cabo a rabo. Una propuesta de quien sostiene a Zapatero en La Moncloa. Una propuesta del socio de Maragall en la Generalidad. Una propuesta, en definitiva, de un grupúsculo catalano-jacobino, con la que se pretende descuartizar España. O lo que queda de ella.
ERC es un partido que, hasta hace bien poco, parecía estar relegado a los museos y a las tertulias con las que Pilar Rahola y Angel Colom nos "deleitaban". Alguien nos tendrá que explicar por qué se está dando alas al grupúsculo.
Autor: Smith
Publicado el 8 de agosto de 2005
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Comentarios moderados.