No será Batiburrillo una bitácora en la que no hayamos tratado a fondo los temas que nos ocupan en este post: el frentepopulismo gallego y el carnicero de Paracuellos. Pero nada nos hacía presagiar que ambas cuestiones iban a conjugarse en una sola noticia.
Santiago Carrillo ha realizado una visita al jefe separatista gallego, Anxo Quintana, líder del BNG y nuevo vicepresidente de la Xunta de Galicia. El ex secretario general del Partido Comunista y actual empleado de Polanco, Carrillo, apoyó las tesis separatistas augurando un nuevo futuro para Galicia bajo la égida de las izquierdas. La verdad es que toda esta discursología radical nos suena bastante a aquella empleada por el genocida de Paracuellos durante los tristes años republicanos que condujeron a España a la peor de las guerras posibles, la guerra civil.
Ni siquiera el carnicero comunista (había muchos más) se ha podido sustraer del mensaje nacionalista del BNG: Galicia "Será una nación con peso en la vida política española", señaló el histórico secretario de Orden Público del Madrid rojo. Sí, rojo: Ejército Rojo, Socorro Rojo, milicias rojas, banderas rojas... todo era rojo en el bando que algunos osan todavía en llamar "republicano". En fin, si Galicia es una "nación", lo mismo va a dar que tenga peso en España que en Europa, pues, a la larga, las naciones terminan exigiendo su propio Estado.
Por su parte el ultraizquierdista que ocupa la vicepresidencia de la Xunta, Anxo Quintana, agradeció la trayectoria política de Carrillo durante toda su vida para luchar por la "democracia y la libertad". Vuelven por sus fueros y nadie parece dispuesto a pararles los pies. Así están las cosas en la España neorrepublicana.
Autor: Smith
Publicado el 8 de septiembre de 2005
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