![]() |
| Sarkozy considera a González un muñeco moldeable que atenderá a cuantas sugerencias le haga. No, amigos, no es gatito todo lo que reluce. |
Lo he leído en varios medios y me cuesta creer que al final Sarkozy nos haya resultado tan frívolo o tan pícaro, o ambas cosas. Me explico, solamente desde el punto de vista de un frívolo, que no se informa en absoluto acerca de la persona que quiere proponer para tan alto cargo, es posible concebir un proyecto semejante. Felipe González no está en la cárcel o no ha pasado por ella porque Barrionuevo y Vera se inculparon de los crímenes del GAL y alzaron una barricada que evitó le alcanzase tan grave acusación. Eso sin contar que el juez peronista Bacigalupo fue el ángel custodio de Mister X en el Supremo, impidiéndole incluso declarar como testigo, para no desacreditarle, en lugar de pasarle a la condición de máximo responsable, como debía haber sucedido.
Por otra parte, en cuanto a los delitos del propio PSOE en forma de corrupciones generalizadas, gente como el catalán Sala, ahora asombrosamente secretario de formación del PSC (o algo así), ha purgado con cárcel durante unos años la autoría de esas comisiones ilegales que Filesa, Malesa y Time-Sport se encargaron de recaudar desde la periferia para todo el partido.
No hablemos ya de otros muchos casos, como el de Roldán, entonces director general de la Guardia Civil, o la jefa del BOE, o el gobernador del Banco de España, o las joyas que el ministro Corcuera iba regalando como sobresueldo a sus cargos más allegados. Felipe González, que debió cortar por lo sano el primer síntoma de corrupción, prefirió refugiarse en las partidas de billar en la “Bodeguilla” y hacer lo contrario: dejar que los socialistas se hincharan a ganar dinero ilegalmente. Es lo que el vicepresidente Guerra, otro corrupto que enchufó a todos sus hermanos en actividades irregulares y a menudo ilícitas, yéndose de rositas —lo de rositas no va con segundas—, hubiera definido a la perfección como: “to p’al pueblo”. Naturalmente, el pueblo siempre han sido ellos, los detentadores del socialismo oficial. Y no sigo, porque la relación de delitos cometidos durante el felipato podría alcanzar una extensión de varias páginas.
Ahora bien, si no es frivolidad, qué le induce a Sarkozy para intentar proponer a un sobrentendido y reiterado infractor para tan alto cargo. El asunto sólo puede obedecer a la picaresca, es decir, Sarkozy considera a González un muñeco moldeable que atenderá a cuantas sugerencias le haga. O lo que es lo mismo, Sarkozy busca un testaferro para gobernar Europa. No olvidemos que González, por su parte, se ha acostumbrado durante años a la servidumbre con Slim y además con su otro “amigo”, el sultán de Marruecos, lo que le da oficio a la hora de convertirse en el corrupto poderhabiente ideal que le haga el servicio al presidente galo, a la postre todo un vivillo. No, amigos, no es gatito todo lo que reluce.
Autor: Policronio
Publicado el 24 de mayo de 2008

No hay comentarios:
Publicar un comentario
Comentarios moderados.