Sabido es que, desde el siglo XIX, la izquierda política se viene arrogando el papel del pacifismo de pro, de manera más bien gratuita. Desde el nacimiento del socialismo, los líderes pensantes de la izquierda consideraban al Ejército como una institución burguesa a eliminar, o en el mejor de los casos a sustituir por un ejército popular. De esta manera, los ejércitos de los Imperios Centrales (I GM) y del Eje (II GM) encarnaban todos los males sin mezcla de bien alguno para cualquiera de los movimientos políticos o sindicales izquierdistas (marxistas, anarquistas, comunistas, frentepopulistas...) de diferentes épocas.
Ocurre que, como todo en la vida, las cosas no son lo que parecen. Y con la Revolución Soviética (Rusia), vino el Ejército Rojo; y con el Frente Popular (España), las milicias rojas; y con el castrismo (Cuba), un ejército de los más poderosos del mundo...
Dos noticias muy actuales que afectan a dos partidos de extrema izquierda, uno catalanista (ERC) y otro venezolano (MVR), ponen de manifiesto nuevamente el verdadero juego de la izquierda en toda esta cuestión: antimilitarismo cuando se lucha contra el Poder; supermilitarismo cuando se está en el Poder. Así de hipócrita es la demagogia progresista universal, porque, como pueden comprobar, para ésto no hay fronteras.
La Esquerra quiere cogestionar su odiado Ejército Español. (Se comenta por sí solo). Por su parte, los chavistas están creando una alarmante milicia partidista paralela al Ejército regular. (Para cuando pierdan las elecciones...). Unos quieren dividir el Ejército de España; los otros quieren crear una milicia antiyankee... ¿Es ésta la izquierda pacífica y pacifista? ¿Es esta la izquierda con la que también se lleva nuestro talantudo Presidente? ¡Vivir para ver...!
Autor: Smith
Publicado el 13 de abril de 2005
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Comentarios moderados.