Vuelve el diezmo

El diezmo (del latín decima, diez), era un impuesto del diez por ciento (la décima parte de todas las ganancias) que se debía pagar a un rey, gobernante o a la Iglesia. Bien, según La Razón (enlace roto), en estas últimas horas se ha descubierto que el partido antimonárquico y antieclesiástico llamado Esquerra (antigua ERC) ha enviado cartas a trabajadores de las distintas conselleries que controla en el gobierno de la Generalitat exigiendo una parte del sueldo para sufragar una fundación vinculada al partido.

Es más, la disciplina impuesta por los jacobinos catalanes ha llegado hasta el punto de haber cesado a cuatro técnicos que han participado en la elaboración del anteproyecto de la Ley de Políticas de Juventud. Los cargos políticos de ERC deben abonar entre el 4% y el 24% de su sueldo -en función de la cuantía del mismo- a la Fundación Irla, dependiente del partido, y también deben pagar una cuota quienes, sin ser funcionarios, quieran mantener su plaza como interino en los departamentos de la Generalitat de este partido.

Es curioso, porque la Fundación Irla acaba de ser subvencionada por la Generalitat con 60.000 euros del ala. Ahí es nada. Pero, por lo visto, todo dinero es poco para la sospechosa fundación presidida por Carod Rovira.

Un par de datos más:

1º Las "misivas" vienen firmadas ni más ni menos que por los inefables Xavier Vendrell, secretario general del Consejero Primero de la Generalidad y secretario de organización de ERC, del que Libertad Digital ya comentó en su día sus chapuzas financieras, y Josep Bargalló, conseller primer de la Generalitat. Máxima autoridad, pues.

2º El mensaje se ha enviado no sólo a cargos políticos de primer y segundo nivel, sino también a personal laboral no funcionario ajeno al partido y que ya trabajaba en la Generalitat bajo el Gobierno de Convergència i Unió. Máxima extensión, por lo tanto.

Autor: Smith
Publicado el 25 de marzo de 2006