Como el 3%

No se sabe muy bien lo que mostraba este trío de corruptos separatistas, si una versión del acuerdo al que había llegado o... la relación de funcionarios y contratados a los que se les iba a exigir una mordida para el partido. Hasta tal punto hubo extorsión, que el fiscal jefe de Cataluña le pidió a ERC la lista de empleados a los que se les exigía la pasta. 

Pues sí, amigos. Tal y como señalan diversas fuentes, las extorsiones de ERC acabarán bajo un manto de silencio, al igual que el 3%. Un 3% que ya nadie se cree que fuera (¿y sea?) un 3%, sino la costumbre en nuestras queridas tierras catalanas, o sea, entre el 3% y el 20%.

Lo más escandaloso de todo es que, gracias a que ERC se ha podido instalar en el régimen nacionalsocialista catalán (régimen en el que, gracias al Pacto del Tinell los populares y los demócratas están tan condenados a galeras como los monárquicos tras la Revolución Francesa), los jacobinos independentistas han duplicado sus ingresos por el sistema de cuotas con sólo dos ejercicios de gobierno. Para ser más exactos, en 2005 ERC ingresó 1,06 millones de euros gracias a las aportaciones de afiliados y simpatizantes, frente a los 481.437 euros registrados en 2003. Ahí es nada. Lo pronto que espabilan todos estos "anticapitalistas" de boquilla.

No tengan ninguna duda, amigos. La polémica del impuesto revolucionario catalán pasará a la historia rápidamente. ¿Qué fue del 3%? ¡Nada! ¿Qué será del impuesto-financiación de ERC? ¡Nada! ¿Y saben por qué? Muy sencillo: porque el PSC e ICV cobran igualmente el "impuesto" a sus cargos de confianza... y a los que no son tan de confianza, que algunos empleados pueden haber sido cesados por no pagar la cuota. ¿O qué se creían?

Autor: Smith

Publicado el 28 de marzo de 2006